viernes, 29 de marzo de 2013

3 Meses

Hace tres meses te fuiste, no nos despedimos, ni siquiera pudimos hablar, estábamos más juntas que nunca pero en las peores circunstancias, yo esperando un milagro y tu quizás cansada de tanto sufrimiento. Desde ese mismo tiempo no hay día en el que no me pregunte: por qué a ti?, por qué a nosotros?, será esa etapa de negación y frustración de la que se habla en los casos de duelo. Aun me parece imposible todo esto, imposible que no vaya a volver a verte, imposible que de nada haya servido la fe, la oración, las suplicas al cielo. Pero que me hizo pensar que la vida o Dios se iban a conmover de nosotros cuando allá afuera y a diario sufren miles por causas injustas, que me hizo pensar que íbamos a tener "un trato diferente"?
Desde hace algunos días te sueño todas las noches, algunos sueños son más reales que otros, algunos más dolorosos que otros, pero al final son solo eso, sueños.
Tengo la extraña sensación de que pronto voy a verte, como si fueras a regresar de un viaje, como si estuvieras dándote una licencia de esta injusta vida, pero ahí esta de nuevo la negación o eso que hace que no pueda resignarme y que en contraste con el dolor hace que  mi mente quiera entretenerse y engañarse con falsas esperanzas.
Te amo muchisimo, te extraño aun más.